Cuando no lo consigues

 

Cuando no lo logras. Cuando no lo consigues. No pasa absolutamente… NADA. O quizá es entonces cuando sucede TODO.

Cuando no lo consigues… aprendes. Cuando no lo consigues… creces. O lo que es aquí realmente importante y entraña la respuesta a todas esas preguntas que nunca hubieras querido formular, pero de repente te atraviesan todas juntas: Cuando no lo consigues… lo vuelves a intentar. (Y ya estás un paso, o quizá muchos kilómetros, más cerca de tu objetivo).

85028fd794f268268e347cc13027eaa2

Siempre he escuchado eso de que «se aprende más del fracaso que del éxito», y es que lo dice hasta una canción, que… «Creciendo se aprende, perdiendo se gana».  Pues al final, como todo en esta vida, lo de saber ganar o saber perder, saber conseguir lo que buscamos o por el contrario que nos parezca que «hemos fracasado»: lleva su tiempo. Nadie nace sabiendo, hay que aprender.

Entonces ¿Qué pasa con esto? Pues que un «no conseguido», sea en el ámbito que sea de la vida, sólo constituirá un problema si no logramos aprender algo de éste. Como leí en algún sitio, «no debemos aprender del error literalmente, debemos aprender de cómo superar, evitar o directamente eliminar este error».

Así, estaremos consiguiendo ya dos cosas: En primer lugar, superar ese error, lo cual constituirá ya un triunfo, habiendo transformado así nuestro problema en algo positivo, así como, estaremos mucho más preparados para que, la próxima vez, esto no nos vuelva a suceder (pero tranquilos, somos humanos y lo de tropezar muchas veces con la misma piedra viene intrínseco en nuestra naturaleza, pero como dice el dicho lo que no tenemos que hacer nunca…es «encariñarnos con la piedra» jejejeje).33

Así, los errores nos sirven para aprender y, cuando nos lo curramos para salir reforzados de un intento fallido (no fracaso, pues no habremos fracasado mientras lo sigamos intentando) y buscamos soluciones a aquello que no ha salido como esperábamos, vamos a la vez eliminando la «autocompasión» y las quejas a las que tanto recurrimos cuando algo no está como nos gustaría. Tenemos, por tanto (considero) que aprender a extraer, de cada error, información interesante, que nos sea útil, que nos ayude a avanzar.

3bcda7b8f75a62be4705832757fc9e78

 

En el estudio de algunas artes marciales, se aprende, antes que nada, a caer, entendiendo que, «cuando se aprende a caer, automáticamente se aprende a levantarse pues dejarse caer se traduce en coger fuerza para volver a la lucha». Y es que como afirma Leo Marcus en su libro «El armero», si aplicamos esto a nuestros sentimientos,  si aprendemos a caer, si enseñamos «artes marciales» a nuestras pasiones, a nuestro ego, si dejamos de lado el orgullo, el miedo al ridículo o la obligación de parecer perfectos o de hacer todo de una cierta forma, no será tan grave caer pues nos levantaremos rápido.

 Y cuando las cosas salgan bien… No olvides que lo que no debes de concederle a tu éxito bajo ningún concepto es la vanidad, pues esta sí es la receta que hará que el éxito se convierta en un fracaso (y esta vez sí, sin solución).

f693545da7716e8f0913beffa10c1914

Así que amigo/a, si ayer las cosas no salieron bien.  Respira.  Analiza la situación y crece. Pero después, cálzate las zapatillas, súbete a la bici, ponte las botas o avanza hacia ese nuevo proyecto con más decisión que nunca. Porque tú puedes. Y porque no olvides que si salió mal, es porque tú SÍ lo intentaste.

Laura.

e673ecb09d7fe7ef685808d725dc9082

23 Comments

Post A Comment