La importancia de la psicología para los deportistas

Hoy voy a hablar en base a algún artículo que he leído. Como este tema es un poco más «técnico», voy a intentar ser breve y explicarlo de forma amena para que no se haga aburrido. No soy una experta ni nada por el estilo, así que cualquier corrección o aporte será bienvenida.

En primer lugar vamos a diferenciar entre activación, que es como «la puesta en marcha», y motivación, que es eso que nos mueve. Por ejemplo, para un corredor, su motivación puede ser en un caso concreto el bajar el tiempo del año anterior en alguna prueba. «La puesta en marcha» sin motivación no servirá de mucho, pues probablemente el corredor no logrará su objetivo si no se encuentra motivado y orienta todos sus esfuerzos, sus entrenamientos y sus ganas a lograr este propósito. Se entiende ¿no?

La motivación, por tanto, es importante para persistir en nuestros objetivos, que en este caso, son los entrenamientos y la práctica deportiva diaria a corto plazo, las competiciones a medio plazo y otras metas a largo plazo. Si no hay motivación o no nos orientamos hacia algún objetivo, sea este mantenernos en forma o preparar alguna competición…. ¿Creéis que alguno de nosotros»sufriríamos» día tras día por el mero hecho de hacerlo? Somos «masocas», pero no creo que tanto…

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Existen distintos tipos de motivación: motivación de contexto (como el reconocimiento que se obtiene al ir líder en una competición, y cómo eso te hace sentir), motivación individual (practicar un deporte en memoria de alguien, por ejemplo) o motivación básica (los motivos principales que te llevan a elegir el correr como tu deporte favorito, véase por ejemplo, que te gusta muchísimo pasar tiempo en la montaña) y todas ellas son necesarias para seguir avanzando.

Así, mientras las características físicas de los deportistas cambian de un deporte a otro, e incluso dentro de las mismas modalidades podemos encontrar a atletas de muy diferentes cuerpos y formas, quienes obtienen en todo caso excelentes resultados de igual manera, algo que si que definitivamente no puede faltarle nunca a un buen deportista son la motivación y las ganas de seguir luchando. El componente psicológico es vital, y todos lo sabemos.

Así, algunas de las actitudes principales que debes trabajar si quieres mantener tu fuego motivacional a pleno rendimiento, serían las siguientes:

  • El compromiso, una buena ética de trabajo y la persistencia. Si queremos conseguir un objetivo y nos orientamos a él, lógicamente no valdrá con la motivación, tenemos que transformar esta motivación en ganas de trabajar día tras día, de soñar, de seguir luchando.
  • Una palabrita algo difícil, pero que lo resume todo: la resilencia. Por muchos problemas que tengas, muchos errores que cometas y muchos fracasos que se te vengan encima, tienes que aprender a levantarte siempre. Porque lo importante es el camino y siempre tenemos que seguir corriendo.

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  • Aprender a focalizar tu atención. No debes perder de vista tus objetivos a largo plazo, pero resultaría muy interesante también que aprendieras a focalizarte en  cada uno de tus entrenamientos, y en cada una de tus competiciones para dar lo mejor de ti mism@ en cada ocasión.
  • Autoconfianza. No debemos pecar de vanidosos, pero sí aprender a conocernos y entender de lo que somos capaces si nos preparamos a conciencia. «Me lo he currado, me he preparado para ello, soy capaz y lo voy a conseguir», es lo único que debe sonar en tu cabeza.
  • Pasión. «Hagas lo que hagas hazlo con pasión». Da igual si te gustan los ultras o eres un corredor de cinco miles. Lucha por tus sueños con todas tus fuerzas porque como siempre decimos… Al final es lo único que nos va a quedar.

Así que nada… A seguir motivados… ¡Campeones!

Laura.

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